En esta Ética, Fichte parte de la conciencia común de encontrarse queriendo, a fin de elevarse desde ahí al primer principio: la espontaneidad del Yo o libertad, y a su conciencia racional o imperativo categórico. En el segundo capítulo, más en las dos primeras secciones del tercero, estudia y deduce las condiciones materia les necesarias para la realización efectiva de la libertad (un mundo objetivo, un cuerpo propio, la individualidad y la comunidad), así como el proceso de elevación del Yo real hasta la conciencia moral, el criterio de la correcta convicción y la esencia del mal radical. En la tercera y última sección, se establece la división de los deberes morales y se ofrece un compendio de los mismos.
Advertencia: Las existencias de nuestro sistema no son precisas al 100%, por lo que antes de dirigirte a una de nuestras sucursales, te recomendamos que llames por teléfono para confirmar su disponibilidad.