El mundo de Willa Cather, su coraje y su independencia, se ve claramente reflejado en esta exquisita nouvelle. Con una prosa espléndida, Willa Cather nos traslada al paisaje desolado de un Oeste huraño para explicarnos la historia de una mujer que, tentada por las circunstancias, pasa de ser una dama respetable a una mujer señalada por todas las habladurías que inundarán el día a día de todos los habitantes.
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Una mujer que brilla esplendorosa, deslumbrante; su vida vista a través de un jovencito que queda hechizado desde la primera vez que la ve, descendiendo del carruaje que la transportaba, él supo enseguida con toda certeza que se trataba de una mujer única. Encantadora en todos los aspectos, inevitablemente el joven se enamora, y a medida que va creciendo, su amor por ella también. La considera perfecta, pero lejos de serlo y debido a su condición humana, en un momento difícil, el dolor, la desilusión y la incertidumbre la hacen tomar decisiones equivocadas consiguiendo que toda la admiración que inspiraba se convierta en desprecio y rechazo. Hasta su joven admirador se aleja con resentimiento; es sencillo sentir empatía hacia él, pero, ¿Qué hay con ella?
¿Es posible que una mujer excepcional, en un momento sombrío, pierda todo su brillo y se convierta en alusión de vulgaridad? Fue juzgada severamente; merecía indulgencia. En el fondo se anhela que vuelva a brillar con toda su intensidad, ese debe ser el destino de tan exquisita mujer.
Para retomar su vida, como ella misma hubiese pensado, solo necesitaba tener suerte.
Una mujer que brilla esplendorosa, deslumbrante; su vida vista a través de un jovencito que queda hechizado desde la primera vez que la ve, descendiendo del carruaje que la transportaba, él supo enseguida con toda certeza que se trataba de una mujer única. Encantadora en todos los aspectos, inevitablemente el joven se enamora, y a medida que va creciendo, su amor por ella también. La considera perfecta, pero lejos de serlo y debido a su condición humana, en un momento difícil, el dolor, la desilusión y la incertidumbre la hacen tomar decisiones equivocadas consiguiendo que toda la admiración que inspiraba se convierta en desprecio y rechazo. Hasta su joven admirador se aleja con resentimiento; es sencillo sentir empatía hacia él, pero, ¿Qué hay con ella?
¿Es posible que una mujer excepcional, en un momento sombrío, pierda todo su brillo y se convierta en alusión de vulgaridad? Fue juzgada severamente; merecía indulgencia. En el fondo se anhela que vuelva a brillar con toda su intensidad, ese debe ser el destino de tan exquisita mujer.
Para retomar su vida, como ella misma hubiese pensado, solo necesitaba tener suerte.
