Soñando reconstruir el Imperio romano en el mediterráneo, Mussolini envió al ejército italiano, entre otros lugares, a Grecia. Pronto los soldados aprendieron que Sagap (o, como ellos pronunciaban, Sagap) en griego quería decir Te quiero, y obtuvieron más éxitos entre las griegas que en sus campañas militares. Un friso entr etejido de relatos delicado y poético que nos habla del amor, con el trasfondo del mar griegoun amor a veces romántico y casi siempre trágico, entre los soldados invasores y las habitantes de las islasy de la necesidad del calor de un cuerpo cuando duele la soledad.
Advertencia: Las existencias de nuestro sistema no son precisas al 100%, por lo que antes de dirigirte a una de nuestras sucursales, te recomendamos que llames por teléfono para confirmar su disponibilidad.