Toda pregunta recibe una respuesta. Todo deseo es concedido. Toda plegaria, atendida. Procedes de un caudal infinito de bienestar que puede fluir en todos los aspectos de tu vida. Y si tus deseos insatisfechos te hacen hoy infeliz, es sólo porque aún no has aprendido a manifestar tus anhelos de forma que te abran las puertas a la vida plena y gozosa que mereces. Eres un ser de luz, al que se le ha concedido el don de venir a la Tierra a llevar una vida de gozo y plenitud. Existe una inmensa abundancia de todo tipo de dones a tu alcance en cualquier momento: amor, reconocimiento, salud, abundancia... Y si ahora no lo percibes así, tal vez sea porque aún no estás en disposición de recibirlos.
Advertencia: Las existencias de nuestro sistema no son precisas al 100%, por lo que antes de dirigirte a una de nuestras sucursales, te recomendamos que llames por teléfono para confirmar su disponibilidad.