El efecto espejo entre signos es un concepto astrológico originario del período grecorromano, pero perdió vigencia a lo largo de los siglos cuando la astrología fue perseguida, especialmente a principios del siglo XX. Ahora merece ser recuperado y devuelto a la posición prominente que ocupó en su día.
Según el efecto espejo, existen seis parejas de signos que tienen el mismo poder y atributos y áreas de actuación parecidas. Son signos que se miran el uno al otro y que están unidos por un vínculo conyugal a través del cual comparten algunos atributos. Sin embargo, cada pareja de signos forma los dos polos de un mismo eje y ello hace que sean opuestos psicológicamente: su forma de actuar es antagónica pero complementaria al mismo tiempo. El efecto espejo determina que los signos persigan objetivos similares.
Por otro lado, no hay que confundir el efecto espejo con la oposición entre signos. Dos signos opuestos están muy alejados el uno respecto del otro. Los fines que buscan y su forma de actuar son totalmente contrarios. Aunque los signos opuestos están en un mismo eje, no se ven el uno al otro porque la Tierra se interpone entre ambos. En cambio, los signos vinculados por el efecto espejo sí se ven. Cuando dos personas de signos vinculados por el efecto espejo se encuentran, perciben en el otro una manera de actuar similar, pero a la vez opuesta.
Advertencia: Las existencias de nuestro sistema no son precisas al 100%, por lo que antes de dirigirte a una de nuestras sucursales, te recomendamos que llames por teléfono para confirmar su disponibilidad.