He aquí el segundo y último diario que Krishnamurti escribió con su puño y letra. Lo que ya no pudo escribir lo grabó poco antes de morir. Quizá por la intimidad que este método implica el lector se siente más próximo que nunca a este gran maestro espiritual: puede que hasta tenga la impresión de hallarse dentro de su misma conciencia.
Advertencia: Las existencias de nuestro sistema no son precisas al 100%, por lo que antes de dirigirte a una de nuestras sucursales, te recomendamos que llames por teléfono para confirmar su disponibilidad.